17 de junio de 2015

Panecillos con leche de cabra


Y, otro año más, llegan las fiestas del barrio. Mi relación con este jolgorio ha pasado por todas las fases posibles: desde la indiferencia total, pasando por festejarlas sin más, continuando por colaborar en su preparación y de vuelta a la indiferencia absoluta. Esto tiene una explicación: colocan las barracas y el escenario justo delante de mi casa. Llevo toda la santa vida aguantando la música infernal hasta las mil y monas, el olor de los chorizos, la gente meando en las puertas de la escuela infantil (y el olor que con el calor entra en las casas aledañas) y todas las demás bondades que ofrecen los regocijos del pueblo. Así que lo he intentado todo. Normalmente hago como que no están ahí, pero con el ruido acaba una con el espíritu despeluchado. De ahí mi intento de unirme con el enemigo. Pero ni por esas. Al final, cuando llegaba a casa el estruendo seguía estando delante. Por no hablar de que con el calor que suele hacer esos días no puedo dormir con la ventana abierta por el hedor que sube. Vamos, que no redimía nada. Ahora lo que hago, generalmente, es desaparecer en esos días. Pensaréis que soy una rancia, y un poco sí, pero todos los años la misma gaita es un poco exasperante. 
Luego sucede una cosa curiosa: los que organizan las fiestas, en su mayoría, son gente de otros barrios. ¡Así también monto yo la juerga padre! Pero tengo que decir que las fiestas tienen su parte buena, y es que, en los barrios como en los pueblos, puedes bajar sola y siempre te vas a encontrar con mucha gente que conoces (deseables e indeseables) y que hace tiempo que no ves. Y con eso me quedo, con las charlas vespertinas en las tardes muertas de Junio con una cervecita en la mano sentada en los bancos de piedra ( con eso y con el reparto de paella gratis el domingo). Que oye, algo es algo.

Y bueno, yo y la leche de cabra. Está exquisita de cualquier manera. Estos panecillos los hice un poco por ver qué podría pasar. Lo que pasó fue que estaban tan buenos que no duraron nada. De un día para otro están incluso mejor porque los sabores han asentado y ¡es todo cabra!. Los he hecho ya unas cuantas veces porque son mis panecillos favoritos para el desayuno (con su tomate de rigor untado). Totalmente recomendados.


Para unos 18-20 panecillos

900 g de harina panadera
600 ml de leche de cabra
50 g de levadura fresca de panadero
1 cucharada sopera de sal

Disolvemos la levadura en la leche de cabra y mezclamos con el resto de ingredientes cuidando que la sal y la levadura no se toquen. Amasamos unos 10-15 minutos. Damos forma de bola a la masa y dejamos levar una hora tapada con un paño húmedo en un sitio sin corrientes. Pasado el tiempo hacemos porciones de la masa en forma de panecillo y colocamos en la bandeja del horno. Dejamos reposar otra hora. Después del segundo reposo precalentamos el horno a 200º. Greñamos los panes y espolvoreamos de harina. Introducimos al horno 30 minutos a 180º o hasta que estén dorados. Sacamos, dejamos enfriar y ¡a comer!

19 comentarios:

  1. Mi relación con la leche de cabra no es muy buena para qué te voy a engañar, era la que tomaba de pequeña, a veces a la pura fuerza y terminé por odiarla. Sí que me gusta en el arroz con leche y en estos panecillos me da a mi que también me van a venir muy bien. Así tan infladitos tienen una pinta de tiernos que te llama a probarlos y seguro que nadie podrá comerse solo uno de lo ricos que serán.
    En cuanto a las fiestas vecinales, la buena noticia y a lo mejor la única, es que se pasan, antes o después acaban, así que paciencia chica.
    Bss

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    1. Lo que te pasa con la leche de cabra a mí me pasa con los croissants, los odio con todas mis fuerzas y si pudiera los exterminaba de la faz de la Tierra, o por lo menos de mi faz jajaja Por lo menos tú toleras algo la leche de cabra y la verdad que en los panecillos les da sabor pero lo justo para no cansar. Yo aquí sigo, tachando días para que terminen las fiestas. ¡Que ya queda menos! Besoos!

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  2. Hola Silvia, no conocía tu blog y al pasar y ver estos panes me he quedado! creo que tiene que tener un sabor espectacular, enhorabuena!

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    1. Buenas! Pues bienvenida a mi zulillo bloguero! Me paso por el tuyo a cotillear ya mismo! jajaja Un beso!

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  3. muerta me he quedado con los panes y la pintaza que tienen, además ha sido verlos me han dado ganas de ponerme a amasar jejejej, bueno a ver si acaban las fiestas pronto y puedes descansar tranquilita!! un besote y a ver si puedes pasar buena noche guapa!

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    1. Lo bueno de las fiestas es que me estoy poniendo a hacer masas de pan por kilos, ¡que con algo que hay que desahogarse! jajajaja Relaja más que cuatro clases de yoga seguidas! Besootes!

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  4. ¡¡¡Hola guapa!!!, yo me solidarizo contigo al cien por cien, que lo de las ferias de los pueblos es puro coñazo, y si de paso nos ponemos, hasta la Feria de Abril, con la fama que tiene, para mi también es un fastidio, con todos mis respetos a los defensores de pro y por derecho, pero yo por ahí no paso, vamos que me quedo en mi casa pero del tirón, je, je, je...y es que no me gusta, que le voy a hacer, y no soy para nada sosa, ni desaborida. Que ya está bien de fandango y pandereta, de tardes de toros y procesiones de Semana Santa, ¿es que a todos nos tiene que gustar las mismas cosas?, desde aquí reivindico la diferencia y el ser distintos, que yo no soy rara para nada, no me gusta nada de eso y sin embargo me divierto como una niña con muñeca nueva, cuando lo tengo que hacer.
    Y si a ti te vuelve loca la leche de cabra, y estos panecillos, pues ¡¡¡que viva la diferencia!!!
    Besos Silvia y que los disfrutes como si fueran el último bocado del paraíso.

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    1. jajajajajajaja ¡me parto con el fandango y la pandereta! jajajajaj Si es que es verdad, tenemos más fiestas que santos la Iglesia. Y cuanto más cañí es el tema más me aburre. Aunque te advierto que hay algunas cosas que son dignas de ver, así como si fuera uno Félix Rodríguez de la Fuente en el monte, y documentarlas de por vida. Pero con una vez es más que suficiente. Y es eso, que sosainas tampoco soy pero las multitudes haciendo el cromañón me tiran patrás de lo lindo. Conozco gente que en cuanto llega la feria de Abril se largan a Sevilla como si fuera La Meca, se ponen el traje de lunares y ahí que se ponen ciegos a manzanilla y pescaito. Y me da rabia porque por esos patrones no he ido a muchos sitios (por ejemplo, en Andalucía sólo he visitado Granada), pero esto se va a acabar que yo tengo que ir a Estepa a comer polvorones en Agosto jajajaja Un besazo grande!

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    2. Ja, ja, ja...Silvia, lo de los polvorones de Estepa en Agosto, es como una "cuchará" de migas, "bocao" de "mantecao" y "refregón" de bacalao", y no tener ni una gota de agua "pa'beber", como no te lo planifiques bien, te mueres de la calor que hace, ja, ja, ja... Ya puestos, que aquí cada uno barre para su casa, te recomiendo que a Sevilla hay que venir en Marzo, es el mes perfecto, no hace ni frío ni calor, y si tenemos un poco de suerte hasta los azahares estarán en plena floración, otra época es en invierno, Noviembre o Diciembre, las calles lucen preciosas, los días previos a Navidad, y si tienes suerte de ver la lluvia, pues como decía Audrey Hepburn "la lluvia en Sevilla, es pura maravilla", y lo es, ya puedes decir que viviste una de las experiencias, si no de las más bonitas de tu vida, por lo menos de las más insólitas, ja, ja, ja...Besos guapetona!!!

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  5. Hola guapísima !!!
    He visto que publicaste esta mañana, perooo como me había suscrito también el otro día, en mis notas mentales, me he estado esperando a que me llegase la notificación al correo para venir a verte jaja, no me eches cuenta...ya te digo que son mis notas mentales :)
    A mí las ferias, las romerias y todos los bullicios me sobrepasan a día de hoy. Creo que las disfruté tanto hace años, que me dí un atracón de por vida y mi cuerpo y mente tienen bastante por los siglos de los siglos jaja. Así que ni por el plato de paella, hago cola el DOmingo.
    Bueno, igual estoy exagerando, si me dicen que al final de esa cola vas a estar tú repartiéndo estos ricos panecillos con leche de cabra, te aseguro que me espero y hago doble turno si hace falta.
    La leche de cabra me gusta mucho Silvia, y uno de mis quesos preferidos está hecho con esa leche. Aquí casi toda la quesería, funciona con esa especie, bueno y los yogures es que me derrito de gusto ¿para qué nos vamos a engañar?
    Ahora me voy a ver la tarta jaja, que me ha hecho mucha gracia la composición que has hecho.
    Besotes gordos mi niña, que ya andarás en los brazos de Morfeo.

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    1. ¡Uy! A esas horas estaba ya en el quinto sueño! jajajaja Si es que tengo una enfermedad, la enfermedad del abuelo. Me acuesto con las gallinas y por las mañanas despierto yo al gallo para que cante. Si tuviera un rebaño de cualquier cosa (aunque fueran ranas) por lo menos los llevaría al monte y tendría una razón para madrugar tanto. Eso o hacerme monja, que entonces podría rezar los maitines. Pero ni una cosa ni la otra (y casi mejor).
      Las suscripciones de blogger son un poco peculiares porque desde que publicas hasta que notifican me han llegado por el camino dos declaraciones de la renta. Va eso más lento que el caballo del malo jajajaja Pero lo que importa es que va, que ya es bastante teniendo en cuenta que es gratis. Y no seré yo la que se entrometa en las notas mentales de otro, que luego sale uno escaldado (que se lo pregunten a los que han intentado meterse en las mías) jajajaja
      Si es que, qué pereza de aglomeraciones festivas! Y lo más aburrido de todo es que la gente, en las fiestas, saca lo peor que lleva dentro. Bueno y lo de las paellas gratis es de película. Se montan unas colas de aquí te espero y la gente se vuelve huraña por momentos: -"¿te estás colando? porque aquí estoy yo", -"no, es que me estaba guardando el sitio mi primo segundo", - "a mí tu primo me la trae al pairo ¡no te cueles!" Y de repente hay un revuelo montado, casi violento, por un plato de paella al que tampoco le veo mucho sentido. Y lo peor de todo es que suelen ser los jubilados los peores. Me leo y se me quitan las ganas hasta de bajar a por ella jajajaja
      Casi que prefiero comer pan de leche de cabra de primero, segundo y postre! Que como a ti me encanta la leche de cabra y todo lo que se pueda hacer con ella y si llego a saber que en Canarias le leche de cabra está hasta en la sopa cuando el Notario me dijo que si pedía de destino Canarias y le dije "mmmm....bueno....no sé..." (que significa que no en mi lengua jajajaja), me retractaría absolutamente. Ahora me fastidio y lloro en soledad jajajaja Un besazo enorme!

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  6. Contente Silvia que te veo ya asomada al balcón con un cubo de agua para echarlo encima de la gente,jajajaj pues debe ser un gustazo sacar la vena macarra un día, no crees?
    A mí pa concejal de ferias y fiestas que no me llamen que no aguanto sitios con mucha gente sin que me de un ataque de ansiedad pero si hay que hacer una cola pa pillar unos panecillos de esos me pongo una capucha para no ver a la gente y...me apalean pensando que soy un atracador,jajajaja ...jo...errrr, es que estoy flipando con eso de que sean de leche de cabra...me gustaria probarlos a ver a que saben...se te pone cara de Heidi?
    Me voy corriendo a escribir la ultima receta del curso, ay que ganas ya de cerrar por vacaciones, en Septiembre vuelvo con mas recetas y mas kilos,jajajade aqui a nada exploto
    Pasa un verano genial y echales un cubo por encima a los pesados de vez en cuando...agggg que liberación !
    Besazo pa tí Silvia

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    1. jajajajajjajajajajajja Pues no te voy a negar que alguna vez me ha faltado el canto de un duro para ponerme a tirar agua, pero con la calufa que nos asedia encima les haces un favor! jajaja Lo que sí he hecho alguna que otra vez es gritarle a los tipos que se ponen a mear en la puerta de la Escuela Infantil: "¡Qué pequeñaaaaaa!" Mano de santo, oye jajajaja Que les tocas el ego y salen por patas de allí. Por supuesto yo chillo agazapada en la terraza, porque soy una cagueta por naturaleza. Pero es que todos los lunes después de fiestas los niños no pueden salir al patio porque están desinfectando todo lo que se ha colado para dentro. Y oye, que da rabia.
      ¡¡¡¡Noooooooooooooooooo!!!! Que te voy a echar mucho de menos! Y sé que no voy a ser la única porque eres una Reina con corona y todo! Bueno, tú disfruta del verano como una enana y los kilos que se quieran volver contigo los dejas en una maleta abandonada en el aeropuerto. ¡Y aquí paz y después gloria! jajajaj Un besazo enorme y ¡a descansar y desconectar! Que te lo has merecido.

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  7. Yo también quiero probarlos, me llaman mucho la atención, ya no por su aspecto que está de lujo, sino por la leche de cabra que les has puesto, un sabor curioso.
    La verdad es que es un tostón tener la fiesta abajo, ya no te queda más que estar de jolgorio todo el tiempo, o irte a Pernambuco (lo más complicado, jajaja) Ojalá que no sea por mucho tiempo. Besos Silvia.

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    1. ¡Están tan ricos! A veces cuando hago pan y me apetece probar algo nuevo termino repitiendo estos panecillos y ¡vuelta la burra al trigo! Así no hay quién vaya tachando cosas de la interminable lista de recetas pendientes! jajaja
      Yo por si acaso ya he hecho el pan para mañana que luego voy a ver si me escaqueo del ruido infernal! Ojalá tuviera casa en Pernambuco! jajajajaj (o un amigo con casa allí, que es más barato jajaja) Son cuatro días (me lo repito todo el tiempo) Y ya queda menos! Un besazo!

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  8. ¡Ay Silvia! Yo no soy nada de fiestas populares, y si las tuviera en la puerta de casa... lo llevaría francamente mal, la verdad. Así que entiendo que salgas por patas si puedes Aunque la paella gratis los domingos también tiene su aquel ¿eh? ji ji ji

    Estos panecillos te han quedado de lujo. Mira que a mí no me gusta ni el olor de la leche de cabra (pero el queso sí ji ji ji) pero creo que estos panecillos sí que serían de mi gusto

    ¡Besos mil!

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    1. ¡No sabes lo que me alegra leer que hay un frente oculto antifestejos populares! Porque aquí ya vamos unas cuantas jajaja Este año creo que ni la paella me va a rentar. Aunque ayer que repartían limonada a puntito estuve de bajar a por una! Pero mejor me espero a la paella del domingo que ¡hasta le echan gambas! jajaja Lo único que merece la pena, desde luego.
      Y si te gusta el queso de cabra estos panecillos creo que te iban a agradar porque es como si lo llevara untado de serie y luego ya lo rellenas de otra cosa (que si te comes el pan solo siempre viene alguien a decirte aquello de "Pan con pan...", aunque te confieso que a mí me da lo mismo jajaja) Un besazo grande!

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  9. Que chulada de blog tienes!! te invito a que conozcas el mio, yo te sigo, me sigues elmagoylabruja.blogspot

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